Aunque en el pasado la medida del cociente intelectual lo daba la resolución de pruebas lógico-matemáticas y verbales, hoy no cabe duda de que la teoría de las múltiples inteligencias sirve con más eficacia para medir la capacidad de una persona y dentro de todas ellas, se sabe que la llamada inteligencia emocional es la que está detrás del 80% del éxito personal, social y profesional de una persona.

Aprender a gestionar emociones como la ira, la preocupación o el estrés, desarrollar la empatía con los otros y moverse con soltura en sociedad son claves para lograr la productividad en el trabajo y alcanzar al mismo tiempo una vida personal satisfactoria.

Podemos ponernos a trabajar desde ahora mismo distintas técnicas de autoconocimiento, con test y ejercicios prácticos, en lo que es un camino íntimo y muy personal, que en realidad está siempre orientado hacia nuestras relaciones con los demás.